Hace un año comenzaba esta aventura del blog. En el mismo sitio, con el mismo destino, con la misma inquietud por lo que iba a encontrar una vez llegara, escribía las primeras líneas de mis post sobre el viaje a Medjugorje.

Hoy emprendo camino de nuevo hacia esa tierra donde María nos espera. No es un camino nuevo, si no un paso más del camino espiritual que todos debemos emprender.

¿Por dónde va el tuyo?

No retrocedas, no te detengas, no dudes. Paso a paso se llega al cielo. Esos pasos me llevan de nuevo a Medjugorje ¿me acompañas?

San Ignacio de Loyola.

Hablando de caminos espirituales ¡cómo no nombrar al gran santo que celebramos hoy, 31 de Julio! San Ignacio, fundador de la compañía de Jesús, nos da la bienvenida a este viaje, no podíamos tener mejor guía.

San Ignacio es uno de los mejores maestros que puedes encontrar a la hora de aprender a caminar espiritualmente, ya que no se limita a explicarte los pasos, si no que te enseña a DISCERNIR, osea, a saber por tí mismo si un paso va en la dirección correcta o no. Parece tarea fácil, pero no es oro todo lo que reluce. Cómo muy bien explica San Ignacio, el mal espíritu puede provocarte falsas consolaciones, osea, que el maligno puede engañarte.

Dejo aquí un enlace donde se explica algo más sobre esta herramienta tan útil para cualquier caminante que peregrine hacia la santidad, espero que te sirva.

ENLACE DISCERNIMIENTO

La primera tarde en Medjugorje.

La misa de hoy, primera en Medjugorje aunque sin haber dado comienzo el festival, ha sido una verdadera bendición. Tras la lectura del evangelio de Mateo 13 36-43, el sacerdote se ha metido con el, tan humano, vicio de juzgar al otro. Nos ha hecho ver cómo Dios es el único juez porque todos, desde el más Justo (puro trigo) hasta el más malvado (pura cizaña) le pertenecemos. Criticando criticando no podemos cambiar a los demás, ni si quiera a nosotros mismos, el único camino para cambiar el rumbo hacia Dios es abrirse a la acción del ESpíritu Santo, dejar que sus mociones actúen en nosotros y en los demás (volvemos a San Ignacio) y reconocer así la Voluntad De Dios y hacia dónde quiere Él el cambio.

El día ha terminado con miles de personas arrodilladas ant el Pan de Vida, ante Dios Vivo y dando gracias por el inmenso Amor que le ha hecho quedarse junto a nosotros en la forma del Pan.

Ahora toca descansar. Hasta mañana.